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Protección de marca: casos reales en México (Halloween Edition)

  • Soluciones Valadés & Co
  • 29 oct
  • 3 Min. de lectura
Persona sosteniendo una bombilla encendida junto a una libreta con el sello “Copyright Protected”, representando la protección de ideas y derechos de autor. Imagen alusiva a la protección de marca en México, con el logotipo de Valadés & Co. Legal & Business Solutions.

En el mundo de la propiedad industrial, hay historias que dan más miedo que cualquier película de terror: marcas perdidas, pleitos interminables y negocios que desaparecieron por no proteger su identidad.

Y como en toda buena historia de Halloween, estas son advertencias reales: si no cuidas tu marca, puede volver del más allá... pero no para ayudarte.

Prepárate para conocer los casos más escalofriantes de marcas en México, y lo que puedes aprender para que tu negocio no sea el próximo en la lista.

 

1. Google: el gigante que perdió su nombre

Parece increíble, pero hasta los gigantes pueden tropezar.

En 2023, el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) declaró la caducidad de varias marcas de Google por no demostrar su uso dentro del plazo legal.

En 2024, la Sala Especializada del TFJA confirmó la pérdida de derechos sobre “Google Diseño”, ya que la empresa no presentó pruebas suficientes de explotación comercial en México.

Lección del susto:

Una marca no se protege sola. En México, si no demuestras uso real y continuo, el registro puede caducar después de tres años.

La prevención es clave: declara el uso a tiempo y conserva pruebas documentales.

 

2. La Michoacana: la marca sin dueño (ni identidad)

Helados, paletas y confusión legal por montones.

“La Michoacana” es probablemente una de las marcas más reconocidas del país… y también una de las más desordenadas jurídicamente.

Existen más de 230 registros distintos ante el IMPI, cada uno a nombre de personas o empresas diferentes.El resultado: un laberinto legal donde nadie tiene control total y cualquiera puede abrir su propia “Michoacana” sin consecuencias.

Lección del susto:

La fama no equivale a propiedad. Si no registras tu marca desde el inicio y bajo un titular claro, puedes perder exclusividad, coherencia y valor comercial.

 

3. Danesa 33: la marca que resucitó (y a su antiguo dueño le costó caro)

“Danesa 33” fue sinónimo de nostalgia para muchos, pero también un caso digno de expediente.Durante años, Nestlé dejó de usar la marca, y al no demostrar actividad, Helados Vida logró revivirla y registrar el signo nuevamente.

La marca cambió de manos, demostrando que incluso los grandes pueden perder lo que una vez dominaron.

Lección del susto:

No basta con registrar: hay que usar, mantener y defender la marca.

El abandono o inactividad prolongada puede ser aprovechado por terceros para solicitar caducidad o registro posterior.

 

4. Frida Kahlo: cuando la cultura tiene dueño

El arte también se protege legalmente.

En 2025, el IMPI rechazó una solicitud de registro que intentaba usar el nombre “Frida Kahlo” en nuevos productos.

El motivo: la marca ya pertenece a una sociedad familiar y se considera una expresión ligada a la identidad cultural mexicana, protegida por derechos de imagen y de personalidad.

Lección del susto:

No todo lo que suena bonito puede registrarse. Los nombres de personajes históricos o celebridades requieren consentimiento y pueden generar conflictos legales o mediáticos.

 

5. Sanrio y el poder de defender tu marca

En agosto de 2025, el IMPI aseguró más de 7,500 productos falsificados con personajes de Sanrio (Hello Kitty, My Melody, entre otros).

La empresa japonesa trabaja constantemente con autoridades mexicanas para combatir la piratería y las imitaciones, logrando retirar mercancía de circulación en todo el país.

Lección del susto: 

Registrar tu marca es solo el primer paso; hacerla respetar es igual de importante.

El monitoreo constante y las denuncias ante el IMPI son armas efectivas contra la falsificación.

 

Bonus: Disney y el intento de registrar “Día de los Muertos”

En 2013, Disney intentó registrar “Día de los Muertos” como marca en Estados Unidos. La reacción pública fue inmediata: críticas, protestas y el retiro de la solicitud.El caso demostró que la apropiación cultural no es una estrategia comercial inteligente, especialmente tratándose de símbolos nacionales.

Lección del susto:

El respeto cultural también forma parte de la estrategia legal.

Evita usar expresiones populares, religiosas o patrimoniales si no puedes acreditar derechos o consentimiento.

 

Conclusión: el miedo más grande es no proteger tu marca

Los verdaderos fantasmas empresariales no están en las películas: están en los registros olvidados, marcas caducadas y pleitos por nombres no protegidos.

La buena noticia es que todas estas tragedias se pueden evitar con una estrategia legal preventiva.

En Valadés & Co., ayudamos a empresas y emprendedores a:

  • Realizar estudios de viabilidad antes del registro.

  • Tramitar su marca ante el IMPI con acompañamiento completo.

  • Vigilar el uso y defender sus derechos frente a terceros.

Porque las marcas que no se protegen… tarde o temprano vuelven para asustarte. 

 
 
 

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